Me llaman la atención esas personas que cuando deben hacer algo no lo hacen y luego se comunican contigo como si no hubiese pasado nada.
No soy persona de rencores, nada más ajeno a mi. Sería tener, quizás, demasiado aprecio a determinadas personas que no se lo merecen.
El miedo es libre, lo sé, pero si representas un cargo, debes asumirlo. Si no lo asumes, deja el poder a otra persona con más capacidad.
¿O es que lo bonito es representar un cargo pero no hacer nada? Cuando realmente debes asumir algo, por miedo a represalias, ¿dejas de hacerlo?
No estás siendo sincero contigo mismo, pero sobre todo estás engañando a esas personas que te han puesto ahí para que las representes.
Pero luego, no esperes palabras bonitas ni amistades verdaderas. Sino asumes tus responsabilidades, si los demás no pueden esperar nada de ti, si se lo has demostrado con creces, no pienses que aquí no ha pasado nada.
Ha pasado el tiempo, que dicen que lo perdona todo. Puede ser, pero también te enseña las clases de personas que habitan en este mundo. Y con las que quieres relacionarte y con las que no.
Lo siento. Pero con esas personas que tienen miedo y no asumen su cargo, aunque lo siguen ejerciendo, yo no quiero saber nada. Ten el valor suficiente a dejarlo, por favor. Hay personas, lo sé, sin ese miedo. ¿Para qué seguir ocupando un puesto que no representas?
«El miedo es natural en el prudente, y el saberlo vencer es ser valiente.» Alonso de Ercilla y Zúñiga (1533 – 1594). Escritor español.