Días atrás, leía la siguiente respuesta dada por una persona a otra sobre una opinión que había escrito sobre un tema: «Si no eres capaz de comprender un texto, por lo menos no comentes.»
Demasiado fuerte como para quedarme callada. Perpleja me ha dejado el coartar la libertad de expresión con esas palabras.
Y es que opinar sobre algo, expresar la opinión, es manifestar nuestro parecer. Lo que en ese momento pensamos según lo que hemos entendido.
Pueden tratar de explicarse mejor. ¿Por qué no? Pero no para cambiar pareceres en todo caso, cuando cada persona es libre de dictaminar lo que considera oportuno, siempre dentro del respeto y de la educación, por supuesto.
Os dejo, esta hermosa y gran frase del extraordinario escritor José Luis Sampedro:
«Sin libertad de pensamiento, la libertad de expresión no sirve de nada».