Hoy, 20 de noviembre, se celebra el Día Universal del Niño.
No me gusta especialmente el «día de…» porque hay determinadas causas que no valen para un día en concreto, y parece que una vez que pasa el «día de…» ya uno se olvida.
Este Día del Niño está destinado a actividades para la promoción del bienestar y de los derechos de todos los menores del mundo.
Educación y Sanidad para todos los niños. Pero también agua y comida…
En pleno siglo XXI, hay muchos niños que se están muriendo de hambre o por falta de vacunas. Cifras devastadoras.
Quizás sea bueno un Día Universal del Niño, pero no llega. Hace falta algo más.
«Un millón de niñitos se nos muere de hambre y un silencio se duerme contemplándolos.» Jorge Debravo (1938 – 1967), poeta costarricense